Personal de la Agencia de Control Policial procedió en la fecha a la detención de cuatro efectivos policiales de la Unidad Regional VIII Dpto. Gral. López, a requerimiento del fiscal Eduardo Lago, de Venado Tuerto, por una investigación que lleva adelante la Fiscalía en la causa por Allanamiento ilegal, Abuso de autoridad e Incumplimiento de los deberes de funcionario público agravada por la participación de un menor de edad.

Las diligencias fueron concretadas por personal de la Delegación Zona Sur y Venado Tuerto de la Agencia de Control Policial, quienes se constituyeron en la Comisaría de Santa Isabel, donde se logró la detención del suboficial de policía J. E. B. a quien se le secuestró su teléfono celular y en el interior de su chaleco balístico que tenía colocado, se le incautó un revólver calibre 22 en mal estado de conservación, el cual no pudo legitimar.

Otra comitiva se constituyó en el Banco Macro de la ciudad de Firmat donde se detuvo al suboficial de Policía F. G. V., mientras que en la ciudad de Pérez, se logró la aprehensión de los suboficiales de policía J. F. A. y J. J. S. con destino en la Comisaría de Carmen UR VIII.

Las detenciones de los empleados policiales tendrían su génesis en un hecho acaecido en el 2022, en la ciudad de Venado Tuerto, mientras estos se encontraban prestando servicio en el Comando Radioeléctrico de aquella ciudad.

En un caso habrían ingresado a una finca sin medida judicial y procedido a la detención de un menor. Otra de las causas que se investigan tendría relación a un hecho del mismo año y en el cual en un operativo de rutina habrían solicitado dinero a un ciudadano, resultando condenados en esta causa otros integrantes de la policía provincial.

Consultado a la Fiscalía actuante Dr. Lago, dispuso el traslado de los empleados policiales en calidad de detenidos e incomunicados a la Alcaidía de Melincué a su disposición.

El primero de los delitos achacados a los uniformados fue el 11 de junio cuando detuvieron en un control de rutina a dos personas que iban en moto y tras amenazarlos con armarles una causa penal les reclamaron la entrega de 40 mil pesos, aunque se conformaron con 25 mil pesos, contó la fuente policial. Los policías también usaban un ardid que involucraba la utilización de un adolescente, al cual simulaban perseguir para justificar la irrupción a una vivienda.

Eso pasó el 16 de junio pasado cuando un menor de edad, quien era perseguido por personal del Comando, golpeó en el domicilio de la víctima. La moradora abrió la puerta principal, el chico se metió y seguido, aparecieron dos uniformados armados, quienes le apuntaron. 

La Fiscalía contó que los policías revisaron toda la casa y obligaron a una de las moradoras a cambiarse delante de uno de ellos. Luego se fueron sin confeccionar ningún acta ni tomar los datos de los presentes. Finalmente, se llevaron al chico esposado, contó la fuente policial.

Con estos cuatro detenidos son seis los uniformados involucrados en la causa, dos de ellos ya fueron imputados y admitieron su responsabilidad mediante acuerdo abreviado, donde quedaron afuera del delito de coima: se trata de Cristian Iván Bascoy condenado a tres años de prisión y seis años de inhabilitación para ejercer cargos públicos junto a Emiliano Héctor Herraez, quien fue sentenciado tras un procedimiento abreviado a la pena de dos años e inhabilitación para ejercer cargos públicos por cuatro años.