La ong venadense "Imagina: Un Mundo Mejor" se queda sin su única sede ubicada frente al viejo hospital. La crisis económica que vive actualmente el país fue la culpable de que esta importante institución de la ciudad pierda el edificio.
En su sede, entre otra actividades, Imagina dio clases de apoyo escolar, dictó cursos de carpintería para jóvenes y servía la merienda a niños. También realizaban eventos con sus "padrinos y ahijados", y un grupo de mujeres supo tener un ropero comunitario y una feria de ropa.
Imagina se había trasladado a ese edificio hace un par de años, cuando cerró el viejo hospital mediante un acuerdo con el dueño del mismo, pero lamentablemente la actual la situación del país obligó a cambar las cosas.
Más allá de este duro golpe, Imagina seguirá brindando su importante función de ayuda a toda la comunidad de Venado Tuerto.
El comunicado de Imagina
IMAGINA se queda sin sede.
Querida Casa de Imagina, te saludamos, te honramos y agradecemos por todo lo que nos brindaste en estos años. Como comunidad pudimos encontrarnos, agasajarnos e impulsarnos en cada rinconcito.
Imagina no escapa a la crisis económica actual, a la problemática situación de conseguir una propiedad para alquilar, a lo imposible de construir nuestra propia casa.
Pero no importa adonde... ¡nos reencontraremos!... Porque lo más importante es nuestro sentir, nuestros lazos y el camino que aún nos falta recorrer. Porque al igual que las familias argentinas que atraviesan tantos momentos de vulnerabilidad social, sabemos que la fuerza está en nosotros, en nuestros corazones, para poder ser y estar juntos, y salir adelante a pesar de tantas adversidades.
Fue duro en estos últimos días desmembrar nuestra casa, esa que nos costó tanto adaptar y personalizar, pero nos tranquiliza que cada cosa o pedacito de nuestro lugar está siendo destinado a nuestras familias. Nos quedamos con esa alegría de saber, por ejemplo, que un pedazo de nuestra pared permite compartimentar la habitación para un niño o emprender a un joven. Allí se cobijarán nuestras vivencias pasadas y las risas de nuestros ahijados que encontraban en ese espacio un lugar para soñar un mundo mejor.
Gracias familia Marcucci por brindarnos este espacio todo este tiempo. Agradecemos a todas las personas que fueron parte de una u otra forma en este logro.
Seguiremos en cualquier lugar... nos verán de repente por allí haciendo una ronda, o con un cuaderno en un banquito de una plaza. Estaremos donde escuchen mucho bullicio de chicos disfrutando su infancia, en modo creativo…
Seguiremos invitando a IMAGINAr UN MUNDO MEJOR, donde sea y como sea.
Fuente: Marcelo Schroh
