En una jornada marcada por la contundencia del accionar estatal contra el narcotráfico, la ciudad de Venado Tuerto fue testigo del derribo del búnker número 100 en la provincia de Santa Fe.

El operativo, realizado en la mañana de este martes en un inmueble ubicado en Pavón 568, simboliza un hito en la lucha contra el microtráfico de drogas y refuerza el compromiso del gobierno provincial en la pacificación de los territorios. La demolición se produjo en cumplimiento de una decisión judicial derivada de una investigación del Ministerio Público de la Acusación (MPA).
Presencia de autoridades en el operativo
El evento contó con la presencia destacada del ministro de Justicia y Seguridad de la provincia, Pablo Cococcioni, quien supervisó el procedimiento junto al intendente de Venado Tuerto, Leonel Chiarella. También estuvieron presentes el fiscal Iván Raposo, el fiscal Franco Carboni -titular de la reciente creada Unidad Fiscal Especial de Microtráfico provincial-, el fiscal regional Matías Merlo y la senadora departamental Leticia Di Gregorio, entre otras autoridades provinciales y locales. La cobertura policial estuvo a cargo del personal de la URVIII, garantizando la seguridad y el orden durante el operativo. La nutrida presencia de funcionarios de diversos estamentos del Estado subraya la importancia que se le otorga a esta política de seguridad y el trabajo coordinado entre los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial.

Un golpe al microtráfico en Venado Tuerto
Este es el cuarto búnker que se derriba en Venado Tuerto, en el marco de la implementación de la ley de microtráfico. El inmueble en Pavón 568 había sido denunciado por el intendente Chiarella, junto al delegado de Seguridad provincial, Nahuel Pasquinelli y la senadora Di Gregorio, tras comprobarse que allí operaba una banda dedicada a la venta y distribución de estupefacientes. El intendente Chiarella, al referirse al operativo, destacó el fuerte mensaje que se envía a las organizaciones criminales y resaltó el respaldo del gobernador Maximiliano Pullaro en esta política de seguridad. La acción coordinada entre las autoridades locales y provinciales demuestra la eficacia de la estrategia implementada para desarticular los puntos de venta de droga y devolver la tranquilidad a los vecinos.

Dos años de la Ley de Microtráfico
El ministro Cococcioni destacó la trascendencia simbólica del derrumbe del búnker número 100, coincidiendo con el segundo aniversario de la ley de microtráfico, sancionada en diciembre de 2023 por iniciativa del gobernador Pullaro y con el respaldo de la Legislatura provincial. El funcionario explicó que esta herramienta legal ha permitido dar una respuesta rápida y efectiva a una problemática que afectaba a numerosas localidades de la provincia. Antes de la ley, las investigaciones de la justicia federal solían ser de mediano y largo plazo, lo que dificultaba la acción inmediata contra los vendedores de droga. Con la ley de microtráfico, la provincia cuenta con la potestad de investigar y juzgar estos delitos, agilizando los procesos y permitiendo desarticular rápidamente los puntos de venta.

Pacificación de territorios y reducción de la violencia
El ministro Cococcioni hizo hincapié en que la venta de droga a nivel territorial genera un entorno negativo que propicia el uso de armas, la presencia de personas con antecedentes penales, la comisión de otros delitos como robos y el fomento de la prostitución. En este sentido, cada búnker que se derriba representa un paso adelante en la pacificación de los territorios y la reducción de los niveles de violencia. El objetivo final es devolver la tranquilidad a los vecinos y garantizar un ambiente seguro para todos los ciudadanos de la provincia. La política de seguridad implementada por el gobierno provincial, basada en la coordinación entre los distintos poderes y niveles del Estado, está dando resultados concretos en la lucha contra el narcotráfico y la protección de la comunidad.












