En la madrugada del sábado, una comitiva policial y el fiscal de Rufino, Mauricio Clavero, se constituyeron en la localidad de Diego de Alvear con la finalidad de proceder al allanamiento de sendas fincas en San Martín al 300 y Dupuy s/n.

El objetivo era la detención de tres sujetos sospechados de abuso sexual a un mayor de edad que se encuentra internado en el Hospital Gutiérrez de Venado Tuerto, quien además del abuso presenta lesiones por golpes recibidos. En la oportunidad se logró la detención de dos sujetos, en tanto que poco antes del mediodía del sábado se produjo la detención del tercer sospechoso como partícipe de abuso sexual, tras el allanamiento de una vivienda de calle San Martín s/n. Arduo trabajo del personal de Fiscalía encabezado por el fiscal Mauricio Clavero, PDI de Rufino, Criminalística de Rufino y personal de las comisarías de Diego de Alvear y San Gregorio. Los sospechosos están alojados en la Alcaidía de Melincué y hoy se realizarán las audiencias imputativas respectivas.

Violencia inusitada

Según el aporte de fuentes no oficiales, el hombre herido, de 42 años de edad, estaba en los últimos días compartiendo la vivienda de un sujeto que había recuperado la libertad hace poco tiempo, tras haber sido imputado por amenazas a una vecina de la localidad durante la feria, por lo cual se le aplicó prisión preventiva. Finalizada la feria, la defensa pidió nuevamente la libertad, que fue concedida por la magistrada, con algunas pautas de conducta. Según los testimonios, el viernes podría haber sufrido el abuso de los sospechosos, por lo que se escapó de la casa, pero fue encontrado por su anfitrión en la plaza, donde tras una discusión resultó golpeado y apuñalado, hasta que intervino un vecino en su defensa. La víctima tuvo que ser trasladada para su atención al Hospital Gutiérrez, donde evoluciona favorablemente. El fiscal Clavero se comunicó con el secretario de Gobierno venadense, quien pondrá a disposición el equipo interdisciplinario de atención a la víctima para asistir al hombre, quien sufriría de esquizofrenia, por lo que también será evaluado por el equipo de salud mental del nosocomio. La víctima es una persona en situación de calle, lo que obliga, además, a contactarse con familiares para derivarlo, luego de su recuperación.