Durante la tardecita del día viernes, las autoridades provinciales de Salud anunciaron de manera oficial que la ciudad tenía confirmado el segundo caso de coronavirus. En esta oportunidad, se trataba del cónyuge de la mujer de 71 años que resultó ser la primera infectada que tuvo Venado Tuerto de COVID-19.

La detección surgió como resultado de un proceso que impulsara Fiscalía, tras ordenarse la realización de estudios al grupo familiar. Sin embargo, la historia se complicaría horas más tardes, de acuerdo a que durante el proceso de cuarentena obligatoria, aún sabiendo de sus posibilidades de estar infectado, el hombre decidió violar las medidas de aislamiento social, preventivo y obligatorio, infringiendo de esta manera el artículo 202 del Código Penal.

La preocupación de los vecinos no tardaría en llegar. Muchos quedaron asombrados al recibir la noticia por haber frecuentado lugares similares donde este individuo –sin intenciones- podría haber propagado el virus. A partir de allí, tomó fuerza el pedido de imputación al nuevo infectado.

 

La palabra del intendente

En representación del Gobierno de Venado Tuerto, posteriormente a trascender el anuncio, fue el propio intendente Leonel Chiarella quien mantuvo contacto con el fiscal Horacio Puyrredón para abordar hacia dónde se conduciría este caso que volvió a conmocionar la ciudad.

“Este señor circuló de manera irresponsable, no tomó recaudos cuando estaba alertado de que el virus podría estar en alguno de sus familiares (su mujer) y violó la cuarentena.  Menospreció el esfuerzo de miles de vecinos que hace unos días se predispusieron a cumplir con las indicaciones del decreto nacional y apoyar las medidas preventivas del Gobierno municipal para resguardar la salud propia y de sus familias. Sabemos que la implementación de cuarentena dificultó las rutinas laborales de muchas personas que decidieron refugiarse en sus hogares y de esta manera disminuir  las posibilidades del brote de coronavirus en la ciudad”, lamentó el intendente.

 

Chiarella con firmeza

En un marco de solicitud de justicia por la violación de cuarenta, surgieron las declaraciones más fuertes por parte de la máxima autoridad municipal: “Nadie está exento a contraer COVID-19, al contrario, si un vecino tiene la desgracia de poseer el virus desde el sistema de Salud los profesionales le brindarán la mayor atención posible, con las medidas de prevención correspondientes. Pero lo que no podemos dejar pasar por alto son las irresponsabilidades que ponen en riesgo la salud de todos; estas conductas deben ser penadas con todo el peso de la ley”, manifestó Chiarella.

 

Responsabilidad de todos

Seguidamente, la máxima autoridad señaló: “Desde el Estado estamos haciendo nuestros mayores esfuerzos para llevar adelante las medidas implementadas. Sin embargo, esto no depende solo de nosotros, requiere de responsabilidad individual de cada uno de los ciudadanos. Entendemos que la mejor manera de cuidarnos es que cada uno se quede en su casa y respetar la cuarentena obligatoria”.

Durante sus palabras, el intendente notificó que las autoridades de Salud provincial durante los últimos días están visitando a todas las personas que pueden haber tenido contacto con el segundo infectado para realizar el protocolo correspondiente. 

Por último, Chiarella agradeció a los vecinos que están cumpliendo con las medidas de aislamiento preventivo y a todos los trabajadores (municipales, de salud, fuerzas de seguridad, Fiscalía y voluntarios de instituciones)que de alguna manera están cooperando en distintas actividades para hacer frente a este difícil momento que atraviesa la ciudad, la provincia, el país.

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Laboratorio de Analisis Clínicos

Mario Maestu