Los empleados del tradicional supermercado céntrico hicieron conocer una carta abierta, dirigida al intendente Leonel Chiarella y a toda la comunidad. Allí piden preservar las más de 80 fuentes de trabajo. La posibilidad de reapertura se trabó a la hora de la aplicación de una multimillonaria multa impuesta a la empresa.

La noticia se difundió rápidamente y traspasó los límites de la ciudad, llegando a tener incluso trascendencia nacional: La Anónima había sido clausurada y se decomisaron toneladas de alimentos en mal estado.

A partir de allí comenzó un largo proceso desde aquel 6 de abril, dando incluso intervención al Ministerio Público de la Acusación, dado que además del tema de los alimentos vencidos y en mal estado, se presume la comisión de un delito, por la forma en que se desarrollaron los hechos.

Y ahí empezó lo que podríamos denominar como un verdadero calvario, por la incertidumbre por la que están pasando las más de 80 familias que encuentran sustento en su trabajo en ese supermercado. La cúpula de responsables de esta sucursal y un empleado raso, fueron despedidos. Pero el resto de los trabajadores no saben qué va a pasar con su fuente de trabajo. 

En una primera instancia se hablaba de que desde el Tribunal de Faltas municipal se había impuesto una multa de entre 10 y 20 millones de pesos. Los responsables de la negociación de la empresa habrían intentado arreglar este tema, aparentemente, estando dispuestos a pagar el máximo (los veinte millones) pero luego se les informa que en realidad la multa sería de más de treinta millones de pesos. Ante esta situación, la empresa estaría reconsiderando la situación y es allí cuando se ve tambalear la realidad de sus 84 empleados. 

La carta

Éstos entonces apelaron a esta carta, como para que se escuche la otra cara de este conflicto, que son los empleados con riesgo de terminar en la calle. Además, todos estos días estuvieron trabajando en dejar todo listo para una posible reapertura. Incluso hasta las góndolas de frío están cargadas, por lo que si se demora la apertura, serían muchos los productos que habría que tirar, por lo que los trabajadores están pidiendo que alguien intervenga y, que si no pueden abrir inmediatamente, al menos alguien disponga que toda esa mercadería sea donada a quien la necesite y no se tire.

Hasta el día de hoy todos estuvieron trabajando pero desde la empresa se les comunicó que desde mañana ya no deben asistir a su lugar de trabajo y esto es lo que, para algunos empleados, pone en duda su continuidad laboral. Vale aclarar que en abril todos cobraron normalmente, y según rumores, también está asegurado el pago del mes entrante, que obviamente es lo correspondiente al mes en curso.

Entonces la duda es: ¿qué pasará después?