Por Esteban Stiepovich

No hay dudas de que hay dos noticias que despiertan expectativas de distinto origen pero igual efecto alentador para aquellos que buscan o intentan solucionar su problema habitacional: el gobierno de la ciudad con su programa Nuestro terreno, que entrara en un proceso de continuidad con el sorteo de 111 nuevos terrenos ante una multitud de familias presentes, y con posterioridad la convocatoria de 20 suplentes que reemplazarán a igual número que no pudieron completar la documentación respectiva por diferentes motivos, son evidencias de la seriedad y transparencia de su metodología de aplicación, dando tranquilidad y confianza a los potenciales beneficiarios. Y ahora el gobierno de la provincia con el lanzamiento de un complejo habitacional de 64 viviendas que está construyendo en el barrio Santa Fe, en trámite de evacuar consultas de aquellos que pudieran haber quedado afuera del padrón provisorio por distintas razones, con la idea de facilitar y efectuar correcciones, si caben, y asegurar el mayor número de inscriptos y posibilidades, siempre conforme a las condiciones que el programa o la reglamentación exigen. Un signo de rigurosidad en la implementación y búsqueda de igualdad para todos, con un sorteo a realizarse entre el 26 y 28 de julio por Lotería Provincial. 

En la Argentina más de un tercio de la población no tiene una vivienda digna, y la tendencia al aumento es manifiesta. No obstante, en medio de la sequía, suelen caer gotas esperanzadoras que son una bocanada de felicidad para quienes les cambia el destino, y alientan la espera de los que sueñan con su techo propio.